Las novedades en el desarrollo de los sistemas de iluminación LED se suceden, coherentemente, casi a la velocidad de la luz. Para muestra, vale destacar que la empresa estadounidense Rohinni desarrolló un papel luminoso, gracias a una nanotecnología que funciona con LEDs del tamaño de un glóbulo rojo, los cuales se mezclan con tinta especial y se imprimen en un material conductivo. Este material puede usarse en cualquier superficie y forma, aunque sus creadores aún están explorando las posibilidades de sus aplicaciones en el mundo comercial.

Una de las ventajas de este material es que tiene la misma duración que un LED convencional, por lo que su periodo de vida útil puede ser hasta de 20 años. Sin embargo, voceros de la empresa reconocen que aún no han logrado organizar los diodos de una manera que puedan iluminarlos individualmente para crear figuras.

Por el momento, la placa entera se llena de luz y, aunque parezca que la aplicación más obvia de este tipo de desarrollos sería en pantallas de televisión, la empresa afirma que no está interesada en ese mercado. Sus aspiraciones están más enfocadas en luces para bicicletas o autos, lámparas para habitaciones e inserciones en diversos gadgets.

La compañía asegura que podremos comenzar a ver esta tecnología en el mercado para mediados del 2015. Rohinni ya está trabajando en una segunda versión de su proyecto, con el objetivo de distribuir los LEDs de manera uniforme.

Acaban de otorgar el premio Nobel de Física 2014 a los científicos japoneses Isamu Akasaki, Hiroshi Amano y Shuji Nakamura, por ser los inventores del diodo emisor de luz, creador de la revolución de la Luz LED.

Finalmente, se ha reconocido el enorme aporte de los tres investigadores japoneses logrando un desarrollo que verdaderamente ha revolucionado los sistemas de iluminación en el mundo y por ello la Real Academia de Ciencias de Suecia señaló que este descubrimiento se inscribe a la perfección con  “el espíritu de Alfred Nobel de hacer inventos que generen un gran beneficio a la humanidad”, y que los sistemas LED son “una nueva luz para iluminar el mundo, más eficiente y respetuosa con el medio ambiente al ahorrar energía”.

Las fuentes de iluminación LED han llegado a transformarse en el desarrollo más importante desde la creación de la bombilla incandescente de luz, ya que logran una eficiencia notable en cuanto a propagación de la luz, evitan los contaminantes de los sistemas anteriores al no utilizar en su elaboración compuestos tóxicos y han reducido dramáticamente el consumo de energía, convirtiéndola en un aprovechamiento mucho más racional de los recursos. Por otra parte, los sistemas LED de ATM, al ser completamente reciclables, tampoco generan un daño al ambiente produciendo residuos.

Desde ATM LEDS destacamos el reconocimiento para los prestigiosos Akasaki, Amano y Nakamura, porque efectivamente estamos haciendo un aporte desde la incorporación de sistemas de iluminación LED, al ahorro de energía, su uso responsable y a la protección del medio ambiente gracias a equipos completamente reciclables.